La seca y otros estropicios

No sólo el conocido problema de "la seca" es el que afecta a los árboles emblemáticos de nuestra tierra. Aunque sus causas están todavía en estudio (hongos, explotación intensiva de la dehesa, no regeneración de nuevos árboles...), existen técnicas de control preventivo que reducen el impacto de esta plaga pero, según parece, lo más efectivo va a ser la ingeniería genética, porque la cosa está difícil.
Personalmente no creo que la solución venga por los fungicidas, porque creo que han sido parte del problema presente (junto a insecticidas y otros productos fitosanitarios, contaminación, cambio climático derivado...), sino por una redefinición del uso de la dehesa, una vuelta a los orígenes tradicionales, más sostenibles y menos proclives a una sobreexplotación de los recursos. Es lo mismo de siempre y parece que muchos no aprenden.

Pero como digo en el título, existen otros estropicios que afectan a nuestros árboles. Y digo nuestros porque son de todos, lo que no significa que tengamos el derecho a hacer lo que nos venga en gana con ellos. Es el caso de los alcornoques de las fotos, justo al lado de un paseo, no es el terreno el que se come al arbol, sino una montaña de escombros el que acaba con él.
Luego nos sorprende que se seque aunque se riegue.